lunes, 27 de junio de 2011

UN RINCONCITO DE LA VERA



Dicen que la primera impresión es la que cuenta, y la nuestra fue un flash en grado superlativo, que, a través de los sentidos embotados de belleza, dejó nuestras almas en suspensión, prendidas del paisaje y del momento. La naturaleza se pavoneaba ante nosotros como se pavonea, sabedora de su poder, una mujer hermosa ante los ojos de un hombre enzarzado en sus encantos. Y como él, ansiosos y primitivos, pretendimos poseerlo todo.
Entre montañas madre, y por intrincados recovecos formados por sabias y pulidas rocas milenarias, la garganta cristalina se deslizaba relajada hilvanando melodías. Agosto se mostraba generoso. Olía a hembra, a hembra almizclada, a hembra tierra madurando frutos. El verde de los alisos, penetrado por los rayos del sol tejía su color de arco iris, y las hojas movidas por el viento nos abanicaban cual esclavo egipcio. Los pájaros se parloteaban su amor, y cada elemento de vida bordaba su labor de fantasía.
Nos centramos en ejercer nuestros sentidos, nos revolcamos en la belleza, y mirándonos fijamente a  los ojos exclamamos al unísono: “¡Este es el Edén!
Y lujuriosos ambos, apuramos la manzana.

domingo, 19 de junio de 2011

A VICENTE FERRER



En el segundo aniversario de la muerte de Vicente Ferrer, traigo de nuevo el poema que compuse como homenaje a su labor y a la grandeza de su persona.

LÁZAROS

Fundió las rejas del hambre,
de la miseria enquistada en sus estómagos,
en sus miradas, en sus manos,
en sus pies cansados de buscar en la nada
durante siglos.

Y les dijo: “Levantaos y andad”.
Tan sólo tengo mis brazos,
mis piernas, mi corazón,
mis ojos, mi voz, mi entusiasmo,
mi amor, y mi voluntad.

Escuchó su voz el agua,
el sol, la tierra, y el viento, 
que raudo cual cartero diligente,
 repartió  el mensaje.
Despertaron las almas dormidas.
Una dijo: estoy aquí,
y yo, y yo, y yo también…

Todos los descastados se sintieron lázaros.

viernes, 10 de junio de 2011

SONETO



        Que has pasado página me dices
que iluso eres amor, nunca podrás
y aunque lo intentes presente tendrás
uno a uno nuestros momentos  felices.

                                     Soy demasiado mujer para ti,  
te lías, se te caen los sombrajos       
huyes y todo se te viene abajo
al encontrarte de nuevo frente a mí
                              
Crees que la otra te dará tranquilidad,
ignorancia crasa la tuya es, amor
traicionas y vendes tu sentimiento.

Y mientras sigues en tu terquedad,
confundido, con miedo y sin valor,
cualquier otro se perderá en mi cuerpo.